La continuación de esta tendencia deberá llevar a que todos los acusados que siguen prófugos de la justicia internacional comparezcan ante el Tribunal.
Con respecto al Sr. Neptune, los interlocutores nacionales explicaron que hasta que no compareciera ante un juez y expusiera su caso no podría ser liberado.
Así, el acusado o imputado de un delito, cuando acude a un juicio, permanece sentado en un banquillo, donde escucha todas las pruebas y testimonios que asisten contra él.
Estados Unidos y Rusia han comparecido este martes ante la Corte Internacional de Justicia que está examinando las consecuencias de la ocupación israelí de los territorios palestinos.