Según se informa, los combatientes de las FNL le cortaron la oreja a un chico de la zona de Benga en la comuna de Isale, aparentemente por haber transmitido información a las autoridades.
Los efectivos de seguridad recurrían cada vez más al empleo de perros dotados de dispositivos complejos insertados en las orejas a través de los cuales recibían las órdenes de los soldados apostados fuera de la vivienda.