4.Entró con el esposo recuperado, con el hijo bien criado, con la hija que nació a los cuatro meses del regreso y a la cual bautizaron con el nombre de Ofelia.
5.Primero, vamos a ver las formas educadas de mostrar sorpresa, o sea, palabras que no sean ni vulgares ni palabrotas, pero que sí son muy coloquiales, del día a día, que no podemos utilizar (o no deberíamos) en reuniones formales.
6.Llore o cante, Altisidora; desespérese Madama por quien me aporrearon en el castillo del moro encantado; que yo tengo de ser de Dulcinea, cocido o asado, limpio, bien criado y honesto, a pesar de todas las potestades hechiceras de la tierra.